Evangelio 26 de marzo
Lectura del santo evangelio según san Juan (8,51-59):
En aquel tiempo, dijo Jesús a los judÃos: «Os aseguro: quien guarda mi palabra no sabrá lo que es morir para siempre.»
Los judÃos le dijeron: «Ahora vemos claro que estás endemoniado; Abrahán murió, los profetas también, ¿y tú dices: "Quien guarde mi palabra no conocerá lo que es morir para siempre"? ¿Eres tú más que nuestro padre Abrahán, que murió? También los profetas murieron, ¿por quién te tienes?» Jesús contestó: «Si yo me glorificara a mà mismo, mi gloria no valdrÃa nada. El que me glorifica es mi Padre, de quien vosotros decÃs: "Es nuestro Dios", aunque no lo conocéis. Yo sà lo conozco, y si dijera: "No lo conozco" serÃa, como vosotros, un embustero; pero yo lo conozco y guardo su palabra. Abrahán, vuestro padre, saltaba de gozo pensando ver mi dÃa; lo vio, y se llenó de alegrÃa.» Los judÃos le dijeron: «No tienes todavÃa cincuenta años, ¿y has visto a Abrahán?» Jesús les dijo: «Os aseguro que antes que naciera Abrahán, existo yo.» Entonces cogieron piedras para tirárselas, pero Jesús se escondió y salió del templo.
Comentario
Benedicto XVI se dedicó especialmente al tema de los ateos y agnós-ticos.El tenÃa cierta esperanza de poder recuperarlos para el cristianis-mo.Tuvo, incluso,unas largas entrevistas, mano a mano, con el famoso filósofo y sociólogo alemán Jorge Habermas, que es un agnóstico sereno. Pero parece que quedaron en tablas.También invitó a algunos agnósticos a las jornadas de los Creyentes de diversas Religiones,pues suponÃa que an-daban buscando a Dios... Algo parecido hacÃa Jesús con los escribas y los fariseos: tenÃan un vida honrada y creyente, pero no acababan de creer en Jesucristo, el Hijo de Dios Padre ( al contrario de Nicodemo ,que cambió en una sola noche).En el evangelio de hoy Juan nos va narrando otras lar-gas discusiones...