Evangelio 15 de Marzo
Lectura del santo evangelio según san Mateo (5,43-48):
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Habéis oído que se dijo: "Amarás a tu prójimo" y aborrecerás a tu enemigo. Yo, en cambio, os digo: Amad a vuestros enemigos, y rezad por los que os persiguen. Así seréis hijos de vuestro Padre que está en el cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y si saludáis sólo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto.»
Reflexión
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Dt 26,16-19: Serás el pueblo santo del Señor
Mt 5,43-48: Sed perfectos como el Padre celestial
Para Jesús, el amor al enemigo es vinculante para todos sus discípulos y discípulas, y no puede haber ninguna ley, ni religiosa ni de otra naturaleza, que les obligue a renunciar a ello. El amor al enemigo nos hace semejantes al Padre del cielo, que “hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia sobre justos e injustos”. La actitud del Padre hacia todos, es referente para nuestras relaciones interpersonales, que deben distinguirse por una “mayor exigencia” en el amor que vaya más allá de las simpatías o antipatías personales. Sin ese amor mayor del Padre, tendríamos poco o nada que ofrecer al mundo de hoy