Evangelio 10 de agosto
Lectura del santo evangelio según san Juan (12,24-26):
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discÃpulos:
«Os aseguro que si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto. El que se ama a sà mismo se pierde, y el que se aborrece a sà mismo en este mundo se guardará para la vida eterna. El que quiera servirme, que me siga, y donde esté yo, allà también estará mi servidor; a quien me sirva, el Padre lo premiará.»